Nunca me interesó demasiado la
zoología, hasta que en un documental de La 2 (“Evolución”, altísimamente
recomendable) me encontré con este animal, lejano (o no tan lejano) pariente
nuestro. El bonobo (pan paniscus), un simio cuya organización “social” (un
matriarcado basado en la cooperación de sus miembros) resulta envidiable. Los
bonobos son una de las pocas especies cuya sexualidad no está exclusivamente
ligada a la reproducción, si no, más bien, a la socialización y al placer (de
hecho, la relación sexual predominante, sin excluir todas las otras combinaciones posibles es
la homosexual femenina, quedando la heterosexual solo como el método instintivo
para la indispensable perpetuación de la especie. Y siendo las predominantes relaciones
entre hembras -una forma de tejer alianzas que aseguren su predominio social-).
Porque al contrario que su pariente cercano, el chimpancé, las hembras bonobo
“dirigen” esa sociedad constituyendo un auténtico matriarcado. Y la competencia
“chimpancé” deja paso a la cooperación pacífica. Esta sociedad “bonova”
persigue fundamentalmente el placer y el bienestar de sus miembros, adelantándose
sustancialmente a la evolución biológica humana que sólo en un estadio
posterior hemos llegado a una conclusión ¿similar? (la cultura, o lo que se
llama en terminología antropológica, conjunto de memes de difusión). Porque
culminada la evolución biológica de la especie humana, la única manera de
seguir mejorando que nos queda es la cultural -la apropiación de una serie de
“memes” no ya tecnológicos, si no culturales (los que se dan a partir de las
estructuras más desarrolladas con que consiguió culminar la evolución biológica humana: el lenguaje y
la historia)-.
Tribadismo entre dos hembras bonobo: la relación sexual predominante en la especie
Tribadismo entre dos hembras bonobo: la relación sexual predominante en la especie
Creo que somos protagonistas (en
el sentido de que está sucediendo ahora) de uno de esos momentos
transcendentales de la Historia de la humanidad. La “Crisis” no es una crisis
cualquiera. Es el fin del sistema socio-económico capitalista que llevaba
funcionando, por lo menos, desde el siglo XVII- XVIII, un sistema que se mostró
eficacísimo para permitirnos un desarrollo tecnológico sin precedentes, pero
como el esclavismo en la edad antigua, o el feudalismo en la edad media
sencillamente ha acabado por agotarse y ya no da respuestas a nuestras
necesidades. Nada nuevo en la Historia humana. A la lógica incertidumbre del
momento sucederán nuevos retos que el ser humano podrá solucionar si sabemos
afrontarlos con nuestra mejor arma: la razón.
Quizás nuestra solución como
especie, antes que la dinámica del capitalismo se nos escape definitivamente de
las manos y aniquilemos al planeta y a nosotros mismos con él, sea pararse, observar y emular el comportamiento de alguna otra
especie (que, además nos es relativamente cercana en el tronco de la evolución)
que ha elegido otro camino para su desarrollo (el de la cooperación entre sus
miembros y el goce sexual como manera de resolver sus conflictos). Quizás, para
sobrevivir, debamos afrontar un cambio de valores y abandonar los de nuestro
“primo” chimpancé, para abrazar los de este otro primo nuestro, el bonobo. Al
fin y al cabo, todo queda en familia. Ya en sociedades muy desarrolladas como en Islandia se
está produciendo algo así. Si el
predominio del género masculino (modo de vida chimpancé) consigue dejar paso al
femenino (modo de vida bonobo) es posible que a los humanos nos empiecen a ir
mejor las cosas. Aunque, como siempre, dudo: los ejemplos de Anghela Merkel, Elena Valenciano, Pilar Rahola,
Margaret Thatcher o Esperanza Aguirre tampoco es que sean demasiado
alentadores.
11 comentarios:
jajajaja, entrañables los bonobo.
Sobre ellos, siempre recuerdo una anécdota del primatólogo Frans de Waal, que trabajaba con esta especie. Contaba en una entrevista que un día uno de sus bonobos solicitaba su atención desde la jaula. De Waal, pensando que el animalillo cariñoso quería darle sólo un amistoso 'piquito', se caercó a él... pero el bonobo le agarró la cabeza con violencia para meterle la lengua hasta la tráquea! :)
Será porque a los bonobos lo que más les gusta es follar. Y ese buen hombre (el tal De Waal) debió de resultarle atractivo. Es que ya ni los monos respetan nada...
Qué interesante post, Koolau.
No obstante, yo no creo que estemos asistiendo al fin del sistema capitalista. Cuando cayó Lehman Brothers aparecieron en prensa numerosos artículos planteando que lo sucedido anunciaba precisamente ese fin y exigía la búsqueda de modelos alternativos. Cuatro años después, el capitalismo, cada vez más salvaje gracias al triunfo del neoliberalismo sobre la socialdemocracia, campa por sus fueros con tan pocas cortapisas como hace cuatro años. Para que el capitalismo acabara los políticos tendrían por una vez que ponerse en contra de los poderes económicos y financieros. Pero el día a día muestra que cada vez se encuentran más a su servicio.
Por otra parte, Thatcher, Aguirre o Merkel son para mí ejemplos de mujeres llegadas al poder gracias a la interiorización de valores masculinos, y no precisamente por su voluntad de cambiar el modelo masculino existente sino de reafirmarlo. Pero quizá todavía estemos en el punto en el que llegar a un puesto de poder exija tal operación y, por tanto, muy lejos de ser capaces de proyectar una sociedad basada en los valores tradicionalmente asignados a las mujeres.
De los bonobos tenemos mucho que aprender. Y también en lo que respecta al mercantilismo sexual que impera por nuestra sociedad y que nada tiene que ver con la búsqueda del goce para resolver conflictos.
Un beso!
Interesante y estimulante entrada. Me fascina tu fina ironía. Me gustaría puntualizar algunas de tus afirmaciones. La primera, la referida a la culminación de la evolución biológica de la especie humana. Eudald Carbonell en su libro 'Encara no som humans' explica que la evolución biológica de la especie humana no está culminada, pues la tecnología actual permite intervenir en el proceso evolutivo. Dice: "La selección técnica habrá facilitado el que en el siglo XXI todavía parezca ciencia ficción: la implantación de sistemas permanentes de información en el cerebro, los ciborgs bien desarrollados, los ordenadores moleculares (...) El proceso de biotecnología puede llegar a puntos inimaginables. Podemos pensar que la manipulación genética nos podrá adaptar a vivir en ambientes sin atmósfera." Por otra parte hablas de mejora cultural como única vía para seguir avanzando. Tomando la definición que la Etología da de la cultura, costumbres, actividades o comportamientos transmitidos de una generación a otra en grupos de animales por imitación consciente de dichos comportamientos, podríamos afirmar que los animales también tienen cultura. Por último, me gustaría establecer las diferencias entre lenguaje, cultura e historia, siguiendo los estudios de lenguaje de Agustín García Calvo. En su obra afirma que el ‘lenguaje común’ o ‘natural’ viene del inconsciente. La prueba de ello es que hablamos literalmente sin pensar en el mecanismo que produce ese lenguaje. De tal manera esto es así que, si pensáramos en cómo se produce el mecanismo, la comunicación no sería posible. Sin embargo, la escritura viene de la parte en la que interviene la voluntad, del consciente y, por tanto, sometida a manejo por parte de los poderes. De hecho, afirma que la historia comienza con la escritura. Así, el avance que propones por la cultura, teniendo en cuenta que ésta viene de arriba, del poder lo veo difícil, más bien habría que desaprender. El avance por la cultura lo podríamos defender ateniéndonos a la teoría de las ideas de Platón por la cual todo mal es ignorancia. El bien, la virtud sólo se alcanza con el conocimiento.
.- Antígona: cuando hablo del fin del Capitalismo intento hacerlo en un sentido "científico", si se me permite la pedantería. Quizás sea yo un anticuado marxista, pero no le doy valor precisamente peyorativo al término capitalista: simplemente lo considero uno de los modos de producción fundamentales que se han sucedido en la Historia (y, quizás, el que más ha contribuido a nuestro objetivo progreso como especie. Pero, sin entrar en consideraciones morales, que no vienen a cuento, su operatividad se ha estancado -o incluso desaparecido-). Y como ocurre reiteradamente en la Historia de la humanidad va a ser inevitable su sustitución. Será un proceso muy largo, posiblemente de decenas de años, posiblemente traumático (como lo fue en, al menos, dos o tres ocasiones en la Historia humana) pero que nos conducirá a otro estadio ahora mismo imprevisible. Y sí, creo que, en ese sentido, 2008 y la quiebra de Lehmann Brothers, marcan un "punto de no retorno". Una de esas fechas (1492, 17889) que nos sirven (un tanto simplistamente) para compartimentar la Historia
Extraño año el 17889. Obviamente sobra un 8.
Mari Carmen: Ya digo que esta entrada es más bien una ocurrencia surgida del visionado de un documental de La 2. Se que carece de rigor científico.
Mi pretensión tampoco es hacer ciencia en ningún momento sino hablar con rigor. Por cierto, en mi intervención hay un error. Dónde dije 'inconsciente'quise decir 'subconsciente'.
Dices, Mari
Carmen, que el profesor Carbonell sostiene, con razón, la existencia de diversas tecnologías para seguir evolucionando como especie. Bien, lo que yo mantengo es que hemos culminado nuestra evolución biológica. Y en absoluto me parece que las tesis de Eudald Carbonell sean contradictorias con las mías: La cultura (la tecnología) es lo único nos puede permitir seguir progresando como especie en una fase que podíamos llamar post-evolutiva.
Y no se tu, pero yo empiezo a sentir cierto vértigo.
Totalmente de acuerdo contigo. Yo siento vértigo no por el futuro sino por el presente.
Queda claro que las bonobas, de tonontas no tienen ni un gen.
Besossssss, Kolakao.
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