martes, 21 de febrero de 2012

¡PLAGIO!


Parece ser que lo descubrió la gran Kim Novak. Me extraña que haya sido la única. Quizás porque “Vértigo” sea mi película favorita, y la haya visto un montón de veces, no tardé nada (a pesar de mi pésimo oído musical) en identificar las notas del film de moda, el ya laureadísimo “The artist”,  como las que compusiera el inmenso Bernard Herrmann para la obra maestra de Alfred Hitchcock. Hubiese sido más honrado  que, al menos, como hiciese Elmer Bernstein, con “El cabo del terror” de Martin Scorsese, se reconociese explícitamente la inspiración (u homenaje) en la partitura original de, precisamente, también Bernard Herrmann para “El cabo del miedo” (J.Lee Thompson, 1962).  (1)

Sin embargo, nada de eso ocurre: ni el director de apellido impronunciable, Michel Hazanavicius, ni el supuesto músico que firma la partitura, un tal Ludovic Bource, ponen el mínimo atisbo de duda sobre su autoría. No obstante, la impostura es tan evidente que me asombra su poquísima repercusión. Y ahí tenemos a “The artist”, una película bastante menor (y, desde luego, mucho menos arriesgada de lo que se dice) acaparando premios, y encaminándose a convertirse en la gran triunfadora del año.

Y es que de “The artist”, poco hay que decir. Su originalidad consiste en optar por prescindir de la palabra en un supuesto homenaje al cine mudo. Sin embargo, la historia es ramplona, y ni siquiera la refrescante interpretación de la pizpireta Berenice Bejo, puede justificar el dinero invertido en la entrada.

Me extraña el entusiasmo con que mi admirado Carlos Boyero la ha recibido (lo confieso, razón principal por la que decidí ir a verla) y aún más que los herederos de Herrmann y Hitchcock, no hayan iniciado ya algún tipo de acción contra Hazanavicius y Bource.

(1).- Quizás influya que Scorsese debía al maestro Herrmann el honor de que, poco antes de morir, este compusiese la magnífica partitura para "Taxi driver".

5 comentarios:

pazzos dijo...

Pues a mí me gusto The Artist, claro que no soy ni la mitad de cinéfilo que tú y no supe descubrir nada en la banda sonora. El caso es que a los pocos días de verla repusieron en la tele "Cantando bajo la lluvia" que viene a ser la misma historia pero mejor contada y cantada. ¡Qué bien envejece esta película!

koolauleproso dijo...

No hay comparación. Como diría un fisio muy bestia (y muy poco políticamente correcto) que me trató es como comparar a dios con un gitano. "Cantando bajo la lluvia" es una obra maestra y, casi, el único musical que soporto sin sentirme ridículo cuando, de repente, unos tipos se ponen a cantar y a bailar sin que venga a cuento. "The Artist" me parece una peliculilla innecesariamente plagiaria (se arreglaba atribuyéndole la música a su verdadero autor)e irrelevante.

koolauleproso dijo...

No hay comparación. Como diría un fisio muy bestia (y muy poco políticamente correcto) que me trató es como comparar a dios con un gitano. "Cantando bajo la lluvia" es una obra maestra y, casi, el único musical que soporto sin sentirme ridículo cuando, de repente, unos tipos se ponen a cantar y a bailar sin que venga a cuento. "The Artist" me parece una peliculilla innecesariamente plagiaria (se arreglaba atribuyéndole la música a su verdadero autor)e irrelevante.

DIARIOS DE RAYUELA dijo...

Completamente de acuerdo con su comentario, se trata de una curiosidad artasana, pero en ningún caso una buena película. Como mucho, entretiene a ratos. Se agradecen además esas precisiones que hace en el post sobre la música del film, uno no había reparado en los "préstamos" a los que alude. La crítica de Boyero también me sorprendió.
Un cordial saludo.
(Por si le interesa, anda aún por nuestras carteleras, las de esta ciudad que compartimos tan desolada de cines, Le Havre, una pequeña joya que sí que merece, en cambio, la pena verse.)

koolauleproso dijo...

Aver si puedo ir a ver "Le Havre" hoy por la tarde, porque no creo que los "centro" la mantengan otra semana más. Ya te cuento